


2 de Febrero del 2013
Un proyecto centrado en el Parque Metropolitano Tercer Milenio de Bogotá busca observar cuál es el papel del espacio público en la resolución de conflictos y cómo se puede lograr mayor equidad urbana.
La conferencia “Capturando y visualizando comportamientos en el espacio público”, dictada por la arquitecta venezolana María Altagracia Villalobos en el Museo de Arquitectura Leopoldo Rother de la UN, hace parte del taller que se realiza actualmente por parte de un grupo de profesores y estudiantes de las universidades de La Salle, Los Andes, UN y el Instituto MIT de Boston.
María Altagracia es candidata a doctoral de la Escuela Nacional Superior de Paisaje de Versalles (Francia) y está al frente de la investigación que se realiza en el Parque Metropolitano Tercer Milenio.
“Queremos mostrar cuál ha sido el proceso de investigación para conformar la metodología que se está utilizando en el taller con los estudiantes y los profesores, con la intención de entender mejor los espacios públicos y cómo estos pueden colaborar en la solución de conflictos sociales”. Más que encontrar algo, interesa la búsqueda, “en esta aprendemos de nosotros, de los otros, del paisaje y de la ciudad”, asegura la arquitecta.
Dentro de los estudios realizados, un grupo de investigación conformado por sesenta personas, ha observado cómo la ciudad toma tiempo para apropiarse de un espacio público. Es un tema donde los puntos de diálogo, los espacios donde puede coincidir el paisaje, las diferentes actividades de la vida urbana, el transporte, el comercio y la historia no se interrelacionan.
“Me encantaría ver un reencuentro de la riqueza de la sabana y la montaña, que se comience a hacer más presente en ese espacio público, porque quizás la naturaleza nos da las lecciones de cómo relacionarnos y cómo convivir entre tantas especies distintas con necesidades diferentes”, afirma María Altagracia.
Altagracia ya había trabajado en Bogotá, por ejemplo, en el Parque de Lourdes, donde realizó una investigación apoyada en artistas locales. Allí buscaron entender el comportamiento del espacio e intentaron aportar algo distinto a la dinámica que existía.
“El Parque de Lourdes, es un lugar donde la gente va muy rápido, va de paso a sus actividades. Tratamos con los artistas, que las personas se detuvieran a mirar el cielo, a leer un libro, a vivir. Simplemente, con entender la relación de la gente con el paisaje podríamos proveer, incluso si fuera de manera efímera, un paisaje distinto de diálogo, de encuentro y permanencia”, concluye.
Oscar Grauer, profesor venezolano del Instituto Tecnológico de Massachusetts en Cambridge, es uno de los integrantes del grupo que viene desde el principio del proyecto. Para él, tener el Parque Metropolitano Tercer Milenio como caso de estudio se ha convertido en un reto. Allí han encontrado un punto neurálgico que está desaprovechado, con una potencialidad enorme de ser mejorado.
Según él, existe un serio problema de aislamiento del parque con su entorno, no hay una participación entre ambos. Se da la necesidad de fortalecer la presencia del parque en la ciudad; para esto se debe mejorar la seguridad, que va ligada a la inequidad. “Tratamos de averiguar si con nuestras profesiones podemos aportar algo al respecto y crear equidad urbana”, resalta el profesor Grauer.
Se espera que esta investigación arroje resultados en seis meses. Es posible que se presente un libro que, según Oscar Grauer, ofrecerá caminos y estrategias de cómo afrontarlo.
Créditos: http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html

Parque Metropolitano Tercer Milenio de Bogotá, donde se realiza la investigación.
2 de Febrero del 2013
Un proyecto centrado en el Parque Metropolitano Tercer Milenio de Bogotá busca observar cuál es el papel del espacio público en la resolución de conflictos y cómo se puede lograr mayor equidad urbana.
La conferencia “Capturando y visualizando comportamientos en el espacio público”, dictada por la arquitecta venezolana María Altagracia Villalobos en el Museo de Arquitectura Leopoldo Rother de la UN, hace parte del taller que se realiza actualmente por parte de un grupo de profesores y estudiantes de las universidades de La Salle, Los Andes, UN y el Instituto MIT de Boston.
María Altagracia es candidata a doctoral de la Escuela Nacional Superior de Paisaje de Versalles (Francia) y está al frente de la investigación que se realiza en el Parque Metropolitano Tercer Milenio.
“Queremos mostrar cuál ha sido el proceso de investigación para conformar la metodología que se está utilizando en el taller con los estudiantes y los profesores, con la intención de entender mejor los espacios públicos y cómo estos pueden colaborar en la solución de conflictos sociales”. Más que encontrar algo, interesa la búsqueda, “en esta aprendemos de nosotros, de los otros, del paisaje y de la ciudad”, asegura la arquitecta.
Dentro de los estudios realizados, un grupo de investigación conformado por sesenta personas, ha observado cómo la ciudad toma tiempo para apropiarse de un espacio público. Es un tema donde los puntos de diálogo, los espacios donde puede coincidir el paisaje, las diferentes actividades de la vida urbana, el transporte, el comercio y la historia no se interrelacionan.
“Me encantaría ver un reencuentro de la riqueza de la sabana y la montaña, que se comience a hacer más presente en ese espacio público, porque quizás la naturaleza nos da las lecciones de cómo relacionarnos y cómo convivir entre tantas especies distintas con necesidades diferentes”, afirma María Altagracia.
Altagracia ya había trabajado en Bogotá, por ejemplo, en el Parque de Lourdes, donde realizó una investigación apoyada en artistas locales. Allí buscaron entender el comportamiento del espacio e intentaron aportar algo distinto a la dinámica que existía.
“El Parque de Lourdes, es un lugar donde la gente va muy rápido, va de paso a sus actividades. Tratamos con los artistas, que las personas se detuvieran a mirar el cielo, a leer un libro, a vivir. Simplemente, con entender la relación de la gente con el paisaje podríamos proveer, incluso si fuera de manera efímera, un paisaje distinto de diálogo, de encuentro y permanencia”, concluye.
Oscar Grauer, profesor venezolano del Instituto Tecnológico de Massachusetts en Cambridge, es uno de los integrantes del grupo que viene desde el principio del proyecto. Para él, tener el Parque Metropolitano Tercer Milenio como caso de estudio se ha convertido en un reto. Allí han encontrado un punto neurálgico que está desaprovechado, con una potencialidad enorme de ser mejorado.
Según él, existe un serio problema de aislamiento del parque con su entorno, no hay una participación entre ambos. Se da la necesidad de fortalecer la presencia del parque en la ciudad; para esto se debe mejorar la seguridad, que va ligada a la inequidad. “Tratamos de averiguar si con nuestras profesiones podemos aportar algo al respecto y crear equidad urbana”, resalta el profesor Grauer.
Se espera que esta investigación arroje resultados en seis meses. Es posible que se presente un libro que, según Oscar Grauer, ofrecerá caminos y estrategias de cómo afrontarlo.
Créditos: http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html