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Conchas de caracoles sufrirían efectos del tributilo de estaño

 
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BOGOTÁ D. C., 05 de agosto de 2017 — Agencia de Noticias UN-

Los avances más recientes de un estudio que busca determinar los efectos del tributilo de estaño sobre los caracoles serán dados a conocer entre las 31 investigaciones que se expondrán en el marco del VI Seminario “Las Ciencias del Mar en la Universidad Nacional de Colombia”, que se realizará entre el 8 y 11 de agosto en la Sede Caribe de la Institución. Continue reading Conchas de caracoles sufrirían efectos del tributilo de estaño

COLECCIÓN NACIONAL DE ANÉLIDOS POLIQUETOS DE LA UNAM, PRINCIPAL COMPILACIÓN DE ESTOS INVERTEBRADOS EN EL PAÍS

 
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anelidospoliquetos03 de septiembre de 2014

La Colección Nacional de Anélidos Poliquetos, que resguarda el Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM, es la principal compilación científica de estos invertebrados en el país. Los organismos que la integran vienen de zonas oceánicas y costeras del país, tanto del Golfo de México como del Pacífico y Mar Caribe, desde áreas someras hasta profundidades de casi dos mil metros.

Contiene más de 60 mil ejemplares de 47 familias y más de 700 especies que habitan en ambientes coralinos, manglares, pastos marinos, sedimentos blandos o ventilas hidrotermales, explicó Pablo Hernández Alcántara, técnico académico de esa entidad universitaria.

Riqueza morfológica

Los poliquetos son gusanos con cuerpo segmentado y setas en sus apéndices laterales (parápodos); constituyen el grupo más diverso del Phylum annelida, que incluye lombrices de tierra y sanguijuelas. La mayoría mide alrededor de un milímetro, pero pueden alcanzar tres metros de longitud. En México se han registrado casi mil 500 especies, principalmente en el Océano Pacífico, refirió.

Se distinguen por su variedad morfológica y formas de alimentación, que les permite habitar en prácticamente todas las profundidades y ambientes marinos. Pueden ser depredadores activos en la superficie, aunque otros son sedentarios y construyen madrigueras o tubos dentro de los sedimentos, se alimentan de materia orgánica adsorbida al sustrato o filtran partículas disueltas en la columna de agua.

Son los organismos más abundantes y diversos en los ecosistemas del fondo del mar. Al excavar remueven y “ventilan” el sedimento al transportar el agua oxigenada de la superficie al fondo. Esto altera las condiciones ambientales y permite la colonización de otras especies, subrayó el experto, adscrito al Laboratorio de Ecología y Biodiversidad de Invertebrados Marinos del ICMyL.

Además, son parte fundamental de las redes tróficas de los ecosistemas bénticos, como presas o depredadores. A partir de distintos poliquetos se procesa harina utilizada como alimento para peces y camarones en granjas acuícolas, y algunas especies generan sustancias químicas de utilidad potencial para sintetizar compuestos farmacológicos. Distintas especies son usadas como carnada, ornamento o en limpieza de acuarios, y otras son capturadas y degustadas vivas o fritas.

La colección

El material depositado en las colecciones biológicas y la información contenida es fundamental para realizar estudios taxonómicos, ecológicos y evolutivos, porque son un almacén de información sobre la presencia y distribución de las especies en los mares de México.

La investigación a partir de estas compilaciones es indispensable para conocer la biodiversidad de un país, frente al deterioro constante que sufren los ecosistemas marinos, que determinará la pérdida de muchas especies, sin que éstas hayan sido conocidas.

Hernández Alcántara recordó que esta colección comenzó a formarse hace más de tres décadas, a partir de los trabajos de Vivianne Solís-Weiss, fundadora y responsable del acervo.

El organismo Spiophanes iowai, recabado en las costas de Mazatlán y descrito por Solís-Weiss en 1983, es uno de los primeros ejemplares catalogados en el muestrario referido. Tres lustros después obtuvieron el registro de Colección Nacional, subrayó.

Hasta la fecha, las especies de poliquetos descritas originalmente en el Pacífico mexicano es de más de 315 pertenecientes a 41 familias. Del total, 172 provienen del Golfo de California, la región marina mejor estudiada del país.

Esta colección es referencia para apoyar diversas investigaciones sobre el fondo marino y cuenta con una sección para depositar material tipo, incluidos alrededor de 20 holotipos y 30 paratipos, base para la descripción original de las especies. Su acervo es consultado durante el desarrollo de tesis en distintos niveles académicos, destacó.

Además, cuenta con una serie de bases de datos de las catalogadas, información útil para estudiar su distribución y determinar sus patrones de biodiversidad, con fines de conservación y protección.

Al ser los invertebrados más abundantes y diversos en los fondos marinos, su estudio aporta información valiosa sobre el funcionamiento de los ecosistemas asociados al fondo oceánico.

La colección es dinámica y crece cada año, con el apoyo constante del personal adscrito al laboratorio. El conocimiento de su taxonomía aún está en desarrollo y se requieren trabajos constantes de revisión y análisis para incorporar y confirmar la presencia de especies en el acervo, finalizó.

Créditos: UNAM-DGCS-506-2014

RESGUARDA LA UNAM LA MÁS DIVERSA COLECCIÓN DE MOLUSCOS Y CRUSTÁCEOS EN EL PAÍS

 
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coleccionmoluscos07 de julio de 2014

La Colección Regional de Invertebrados Marinos del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICML) unidad Mazatlán de la UNAM, posee una de las mejores compilaciones de crustáceos y moluscos del Pacífico tropical americano en el país.

Cuenta con 12 mil lotes, 170 mil ejemplares y está a punto de alcanzar mil 900 especies identificadas, lo que la hace la de mayor representación para el Pacífico mexicano. A 36 años de su creación, su fundador Michel E. Hendrickx aseguró que los materiales reunidos durante diversos proyectos sirvieron de base para formarla y mantenerla.

Este depositario tiene también la colección más diversa –aunque no la más grande a nivel nacional– de crustáceos decápodos (camarones, langostas y cangrejos), en particular de los ambientes profundos; se ha muestreado desde las playas arenosas, rocosas y las lagunas costeras, hasta la plataforma y el talud continentales.

El material recolectado en este tiempo y la revisión del que está en algunos museos internacionales, ha permitido efectuar observaciones taxonómicas de grupos faunísticos, lo que ha implicado la descripción de taxones nuevos (42 especies y tres géneros a la fecha) y la elaboración de trabajos de tipo monográfico que abarcan grupos a nivel genérico o de categorías superiores. El material resguardado en este acervo ha servido de base para la elaboración de centenares de publicaciones de todo tipo, acotó.

“Después de haber trabajado los sistemas litorales, que son los más fáciles de muestrear, empezamos a laborar en aguas más profundas en 1981, cuando llegó el buque oceanográfico El Puma. De hecho fuimos el primer crucero científico que se desarrolló. Iniciamos con el Golfo de California y la plataforma continental y hemos colaborado con otras instituciones en la zona del Istmo de Tehuantepec”.

A partir del año 2000 estudiamos a mayor profundidad, hasta los dos mil 500 metros, con el proyecto de frontera TALUD, apoyado por el CONACyT y la DGAPA de la UNAM. Ya se cuenta con 23 campañas oceanográficas dirigidas, explicó.

Desde sus inicios, el Laboratorio de Invertebrados Bentónicos del ICML, a cargo de Michel E. Hendrickx, se ha orientado al estudio de las comunidades de invertebrados marinos y de aguas salobres del Pacífico mexicano, y en ocasiones se ha extendido a la región del Pacífico este tropical.

Se han investigado especies en ambientes bentónicos y pelágicos, y se ha dado énfasis a las comunidades de crustáceos decápodos y estomatópodos, a los isópodos, los moluscos y, más recientemente, a los equinodermos.

Hendrickx, especialista en crustáceos del área referida, precisó que sus estudios han cubierto una alta variedad de ecosistemas y hábitats. A la par de sus conocimientos, se han aplicado otros sobre los sistemas naturales intactos o perturbados por modificaciones antropogénicas. También, se han recopilado datos ecológicos, biogeográficos o pesqueros en relación con las actividades de muestreo realizadas.

El universitario, que llegó a la UNAM como experto asociado de la UNESCO en 1977, para incorporarse posteriormente al Centro de Ciencias del Mar y Limnología (hoy instituto), destacó el margen histórico y didáctico de esta colección: “Formar taxónomos es fundamental porque el estudio de la diversidad es lento. Se calcula que para lograr identificar todo lo que se conoce de la variedad faunística de los mares se requerirían de 40 a 50 años”.

Lo que se tiene que hacer es formar expertos y para ello se necesita gente que conozca la morfología básica de un grupo de organismos; por ejemplo, los cangrejos de agua dulce. Hasta el momento, el Laboratorio de Invertebrados Bentónicos ha formado en total a 34 estudiantes bajo la dirección de Hendrickx.

Crédisots: UNAM-DGCS-390-2014

IDENTIFICAN EN LA UNAM MÁS DE 50 NUEVAS ESPECIES DE ESPONJAS MARINAS DEL PACÍFICO MEXICANO

 
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nuevasespeciesEl equipo del Laboratorio de Ecología del Bentos (LEB) del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM unidad Mazatlán, que encabeza José Luis Carballo Cenizo, ha descrito más de 50 nuevas especies de esponjas marinas del Pacífico mexicano.

En el país “contamos con una de las diversidades más altas del Pacífico; tan sólo los arrecifes ubicados en la zona mexicana albergan más de 100 especies”, señaló Carballo Cenizo.

En el LEB se estudia de “forma prioritaria” su biodiversidad por razones de conservación y manejo de zonas litorales, de potencial genético y como fuente de nuevos productos naturales.

Entre los invertebrados marinos, son las que tienen mayor número de moléculas biológicamente activas frente a patógenos y diversas enfermedades. Se trata de los organismos donde más productos naturales con aplicaciones biotecnológicas se han encontrado, precisó el biólogo.

De hecho, uno de los pocos fármacos de origen marino que se comercializan en la actualidad se encontró, en 1950, en la esponja del Caribe Tethya crypta (actualmente Cryptotethya crypta), de cuya síntesis posterior se obtuvieron los análogos Ara-A (Vidarabin, Vidarabin Thilo®), antivirales efectivos sobre todo contra diversos herpes, y los Ara-C (Citarabina®, Cytosar-U®), uno de los pocos compuestos efectivos contra leucemias y linfomas en adultos y niños.

Hasta 2004, éstos fueron los únicos compuestos relacionados con el mar en el uso clínico. En 2010 se aprobó el empleo de otro, el Halaven (mesilato de eribulina), análogo sintético de la halicondrina B, un producto natural aislado de la esponja marina Halichondria okadai, indicado para el tratamiento del cáncer de mama recurrente.

Las esponjas son los organismos multicelulares más primitivos y simples que se conocen; constituyen el grupo clave para entender la evolución de los metazoarios.

También son los más longevos del planeta. Algunas de la Antártida viven más de mil 550 años, quizá debido a las bajas temperaturas y a su tasa de crecimiento extremadamente lenta. No obstante, el récord es de la esponja de profundidad Monorhaphis chuni, que forma espículas gigantes que pueden alcanzar los tres metros de longitud y, se estima, viven hasta 11 mil años (±3000).

Hoy se sabe de unas ocho mil especies (casi mil más si se cuenta a las fósiles), pero estimaciones científicas calculan que en el mundo puede haber más de 15 mil sin describir.

Las coralinas, de particular interés

“Un grupo en particular, las esponjas coralinas, despertaron nuestro interés debido a su potencial para registrar cambios ambientales en el mar a escalas geológicas. Forman su esqueleto calcáreo en equilibrio isotópico con su ambiente y se consideran como uno de los mejores indicadores de cambio climático en el mar, pues proveen registros de salinidad y temperatura del agua de cientos de años atrás”, señaló el universitario.

Las indagaciones desarrolladas en el LEB también se centran en conocer los factores que modulan la diversidad de los ecosistemas rocosos y coralinos del Pacífico mexicano.

Parte de nuestro estudio se desarrolla en los arrecifes coralinos, uno de los ecosistemas más diversos del planeta, junto con las selvas tropicales. Se trata de una construcción biológica formada por los esqueletos calcáreos de organismos agrupados en colonias de pólipos y algas, explicó.

Su conservación es una prioridad debido a su riqueza biológica y a la multitud de productos y servicios que como ecosistema proveen al hombre.

Uno de los grupos más importantes en los arrecifes coralinos son las esponjas marinas, filtradoras de la columna de agua; enlazan las cadenas tróficas y remueven bacterias y otros organismos planctónicos, incluido un alto porcentaje de virus, además de participar en la regeneración de nutrientes.

“En la actualidad investigamos la biología reproductiva, la tasa de bioerosión y los mecanismos de dispersión de un grupo de esponjas que vive asociado a los sistemas arrecifales y que tienen la capacidad de excavar el material calcáreo e intervenir de manera relevante en los procesos de bioerosión de los arrecifes.

“A la fecha hemos identificado 20 especies con la capacidad de degradar el esqueleto del coral y modelar la estructura arrecifal” comentó Carballo Cenizo.

En el LEB los universitarios se han dedicado a estudiar, de punta a punta, los arrecifes mexicanos: en las islas Marías e Isabel y en el archipiélago de Revillagigedo, entre otros.

Ya conocemos su distribución, abundancia y micro hábitat, ahora analizaremos su estructura genética y si hay conectividad entre los arrecifes, todo ello para entender cómo se dispersan y se propagan. Necesitamos saber lo más posible para comprender el proceso de erosión. Hay pocos arrecifes en el mundo donde se conozca tan bien la diversidad de esponjas asociados a ellos”, concluyó el biólogo.

Créditos:UNAM-DGCS-231-2014

RECIBE LA UNAM AEROBOTE DE ALUMINIO EN COMODATO

 
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aeroboteEl Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL), Unidad Mazatlán de la UNAM recibió en comodato un aerobote de aluminio marca Alumitech, por parte del Servicio Forestal de Estados Unidos (USFS, por sus siglas en inglés), a través de su Programa Internacional.

Lo anterior, mediante un convenio signado, por parte de esta casa de estudios, por Carlos Arámburo de la Hoz, coordinador de la Investigación Científica, y Elva G. Escobar Briones, directora de ese instituto; por el programa Internacional del USFS, James S. Chu, coordinador del Programa de Aves Migratorias.

Con ello, se fortalecerán proyectos que se realizan en la Unidad Académica Mazatlán del ICMyL; uno de los más importantes es el que se realiza con aves playeras migratorias en los humedales costeros de Sinaloa.

Guillermo J. Fernández Aceves, responsable de esta última investigación, indicó que el aerobote solucionará el problema de acceso a sitios donde él y estudiantes de posgrado que participan en el proyecto, realizan sus indagaciones.

Fernández Aceves lleva a cabo los conteos de aves playeras en Bahía Santa María, Ensenada Pabellones y Huizache-Caimanero, sin embargo, una de las limitantes más importantes es el acceso a las unidades de muestreo. Ahora, se facilitarán y fortalecerán las actividades de campo en estos sitios.

Desde hace años, el académico ha colaborado con el USFS en varios proyectos de investigación sobre este mismo tema en Sinaloa.

La colaboración más reciente se registra a través del Proyecto de Aves Playeras Migratorias (http://www.migratoryshorebirdproject.org), el estudio más grande y coordinado hasta la fecha en la Costa Pacífica de América. Es un esfuerzo conjunto de más de 14 organizaciones, incluido el ICMyL, para conservar esos animales y los humedales en 50 sitios de siete países, desde Alaska hasta Perú.

El proyecto busca determinar las tendencias de la distribución y abundancia de aves playeras en el Corredor Migratorio del Pacífico, así como evaluar los factores limitantes para estas poblaciones, como pérdida de hábitat, contaminantes, disturbio humano y cambio climático, factores que, se piensa, influyen en su cantidad.

Los resultados servirán para hacer recomendaciones, con bases científicas, a los tomadores de decisiones responsables en este ámbito.

Una de las iniciativas del Programa Internacional del USFS es la denominada Internacional de Aves Migratorias del Río Copper (CRIMBI, por sus siglas en inglés). Su objetivo es fortalecer la conservación de estos animales a lo largo del Corredor Migratorio del Pacifico, a través de alianzas internacionales efectivas y acciones de conservación.

Ésta recibe su nombre por el delta de ese río, que es el sitio de parada más importante para dos especies de aves: Calidris mauri y C. alpina pacifica, así como para otras del hemisferio occidental.

Se estima que en la primavera esta área es utilizada por más del 90 por ciento de la población mundial de esas dos especies como última parada antes de llegar a los sitios de reproducción, en la tundra ártica de Alaska. Así, en los humedales costeros de Sinaloa invernan más de 800 mil individuos de C. mauri (más del 20 por ciento de la población), por lo que se trata de una región prioritaria para CRIMBI.

En días previos, James Chu visitó las instalaciones de la entidad universitaria, y Samuel Gómez Noguera, jefe de esa unidad, le entregó la copia del contrato firmado. “Colaborar con el ICMyL ha sido bueno, su trabajo es profesional y hemos logrado formar una relación positiva para el estudio y conservación de aves playeras migratorias”, apuntó Chu.

Créditos: UNAM-DGCS-211-2014