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DESCUBREN NUEVO TIPO DE CAMINATAS ALEATORIAS EN MONOS CAPUCHINOS

 
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monoscapuchinos15 de septiembre de 2014

Los monos capuchinos, que viven en selvas y bosques de varios países de América del Sur, en su hábitat natural realizan movimientos muy variados, más de la mitad destinados a buscar alimento y, el resto, a viajar y descansar.

Interesado en la “ecología del movimiento”, Denis Boyer, del Instituto de Física (IF) de la UNAM, desarrolló con su alumna de doctorado Citlali Solís Salas, un modelo matemático propio para estudiar el movimiento animal, en este caso de un grupo de monos capuchinos libres en la isla de Barro Colorado, Panamá, para indagar si se mueven al azar o siguen algún patrón.

Con datos de campo que le compartió la primatóloga Meg Crofoot, de la Universidad de California en Davis, Boyer y Solís realizaron un trabajo de abstracción que les permitió seleccionar algunas variables, elegir las más relevantes y reducir las caminatas a ecuaciones matemáticas.

Azar o memoria

La pregunta inicial de los investigadores fue si los monos capuchinos se mueven o no al azar.

“En física existe una gran tradición en procesos markovianos (llamados así por el matemático ruso Andréi Markov), que son aleatorios, azarosos y carentes de memoria. En estos eventos, la probabilidad de que ocurra un suceso no depende de acontecimientos anteriores”, explicó el doctor en física.

Aunque las caminatas de los primates en general eran lentas y no muy lejanas de un territorio común, el modelo reveló que, analizados a largo plazo, los movimientos son no-markovianos, pues no son independientes entre sí y están correlacionados con el tiempo.

“Encontramos que los monos utilizan la memoria y el aprendizaje para moverse a sitios conocidos que no están en su rango de percepción inmediata. Ello no depende de la movilidad inmediatamente anterior, sino de hechos guardados en su memoria por mucho tiempo, que rescatan y utilizan para desplazarse y buscar alimento”, detalló.

Memoria y auto organización

Los resultados de este trabajo, publicados recientemente en la revista Physical Review Letters, ubicaron una tasa de 0.4 por ciento de uso de memoria en un minuto de tiempo.

“Aunque parece poco, tiene importancia, pues después de cuatro a seis meses determina patrones espaciales de ocupación”, comentó.

Los resultados del trabajo de Boyer “proporcionan evidencia adicional de que la memoria es un factor clave para la organización de los territorios o hábitos hogareños de los animales”. Aunque el instinto los guía para cubrir sus necesidades básicas, la memoria también influye al realizar sus actividades cotidianas.

Actualmente, el universitario trabaja en un nuevo modelo matemático en el que considera el decaimiento de la memoria. “Entonces pueden emerger vuelos de Lévy, donde los movimientos cortos de la población de monos capuchinos se mezclan con otros largos (que se dan con menor frecuencia).

Créditos: UNAM-DGCS-534-2014

Bosques del trópico, los más propensos a extinguirse

 
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bosquesextitntosMedellín, mar. 21 de 2014 – Agencia de Noticias UN- En esa zona están localizadas las poblaciones más pobres y, por ende, las tasas más altas de conversión de bosques a otros usos de la tierra, bien sea para extraer y comercializar la madera o para ganadería y cultivos.

Así lo señaló Álvaro Duque Montoya, doctor en Biología e ingeniero forestal de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín, a propósito de la conmemoración del Día Internacional de los Bosques que se realiza hoy viernes 21 de marzo.

En ese sentido, el ingeniero explicó que actualmente hay trabajos que estiman, en cuanto al estado mundial de los bosques, que la deforestación está impactando sobre todo a los de los trópicos.

Incluso, muchas veces se convierten en tierras de engorde donde ni siquiera se ponen vacas, resalta el docente. “Es decir, muchas de esas tierras esperan ser ganaderas, pero a veces no lo consiguen; también pueden estar relacionadas con problemas como el conflicto social por la tierra o la falta de cobertura de necesidades básicas como la alimentación.

Por otro lado, el experto en ecología tropical asegura que los bosques siguen siendo ecosistemas que cada vez están más en vía de deterioro, principalmente por la deforestación. “Esto se da hasta el punto en que esta problemática contribuye con el 15% y el 20% del total de las emisiones anuales de efecto invernadero”.

Los bosques juegan un papel muy importante en el medioambiente, sobre todo como reguladores de la temperatura. “Por ejemplo, si no existieran, el aumento de la temperatura que se hubiera esperado para 2010 habría sido del doble, es decir, si se supone que ha incrementado en los últimos 30 años 1°C, pudo haber aumentado de 2° a 3°”, expresa.

Pero además, son fundamentales en la fijación del carbono, uno de los gases de efecto invernadero que está causando el calentamiento global.

Igualmente, el docente manifiesta que hay muchas otras hipótesis que indican que los bosques pueden estar incidiendo en el cambio de los ciclos y la distribución del agua. Y aunque que todavía no hay un consenso completo, considera que la pérdida de bosque puede ocasionar sequías más prolongadas o periodos húmedos mucho más intensos, del tipo de fenómenos como El Niño y La Niña.

Aunque de esto no se tiene aún una evidencia clara, se puede afirmar que si se siguen deteriorando, efectivamente va a haber un efecto muy marcado sobre el clima y diversos ecosistemas.

El panorama en Antioquia

Con respecto a lo local, el ingeniero forestal indica que “es uno de los casos posiblemente más extremos que pueda tener el país. Aunque la cantidad neta de deforestación no es la más alta, los mayores focos están localizados en la zona de la Serranía en el norte del Urabá y en el Bajo Cauca”.

Por ello, el profesor hace un llamado importante sobre la tasa de conversión de bosque y los impactos que generarán futuros proyectos de infraestructura sobre el territorio, como las llamadas Autopistas de la Prosperidad. “Van a provocar el acabose de muchos de los remanentes de bosques”, afirma.

En Antioquia, alrededor de un 30% de la cobertura son bosques secundarios (que se regeneran a partir de inundaciones, quema agrícola, incendio forestal o limpieza de terrenos). Los pocos primarios están ubicados, según el profesor, hacia la Cordillera Occidental en límites con el Chocó, y algunos remanentes quedan cerca al tramo final de la Cordillera de los Andes.

De todas maneras, “la mayoría son bosques secundarios que han sido intervenidos, en alto estado de desarrollo y en alto nivel de degradación. Tengo estimaciones de que aproximadamente unas 20.000 hectáreas son removidas al año en Antioquia”, puntualiza.

En cuanto a las medidas que se podrían tomar, Duque manifiesta que se trata de voluntad política. “Habría que hacer un cambio, primero cultural, para que la gente deje de ver los bosques como estorbo o como potrero y para que comprendan que vale mucho más dinero una tierra que tenga bosque”.

Otro aspecto que habría que atender es el conflicto social, ya que asegura, es el gran detonante que presiona la movilidad de las poblaciones a otras zonas boscosas, en donde la única alternativa es la deforestación.

No obstante, el más grave de todos los motivos es el de la conversión de bosque a zonas de ganadería, un problema muy común en el departamento.

Créditos: UNAL-408-2014

Inversión en investigación apagaría incendios forestales.

 
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15 de Enero del 2013
Así lo estableció la profesora del Departamento de Biología de la Universidad Nacional de Colombia Dolors Armenteras Pascual.
Según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), a la fecha, 1.275 hectáreas han sido afectadas por incendios forestales. Estos eventos han arrasado con bosques y vegetación nativa del país, y han traído, además, pérdidas económicas para las regiones.
La susceptibilidad de los suelos y de la vegetación colombiana en esta época del año está relacionada con el clima: “durante la época de verano la humedad disminuye y esto hace que la vegetación esté más seca y sea potencialmente más inflamable. Es un fenómeno relativamente normal en la naturaleza cuando hay cierta estacionalidad como la tenemos en Colombia”, explicó la profesora Armenteras.
Y agregó “ahora bien, que sea potencialmente inflamable a que se queme es otra cosa; esto es causado por los aspectos biofísicos –clima, pendiente, tipo de suelo– combinados con una serie de factores sociales y económicos”.
Históricamente, cada comienzo de año ha traído estos incendios; si de antemano se conoce que en este periodo existe esta susceptibilidad, entonces, ¿qué sucede?
“Por la misma complejidad del fenómeno, para los tomadores de decisiones es un reto muy grande desarrollar una política adecuada de manejo de los incendios”.
Además, “los recursos que le dedican al tema tanto en investigación como en gestión son mínimos. Ya hemos visto el bajo porcentaje de municipios con equipamiento de bomberos de algún tipo, eso que estamos hablando de la zona andina, en zonas más remotas del país la situación es peor”.
Refiriéndose al pronunciamiento de la Procuraduría General de la Nación, que determinó que alrededor de 533 municipios en Colombia no tienen los medios suficientes para atender emergencias y reaccionar adecuadamente ante los incendios, y que existen municipios que no cuentan con un cuerpo de bomberos, para Armenteras “faltan sin duda, políticas, y más que nada acciones sencillas que deben emprenderse a nivel nacional, regional y municipal”.
Y citó el ejemplo de España, “en donde contratan guardabosques que patrullan en épocas de riesgo. Son contrataciones temporales que ayudan con la vigilancia, la reacción y atención ante eventos de este tipo”.
“Hay muchas cosas que se pueden hacer. Es cierto, más sequía, más probabilidad de fuego; pero no debemos olvidar que con contadas excepciones, el fuego se inicia por la mano del hombre”, indicó.
Por supuesto, la falta de recursos para procesos de investigación sobre los incendios forestales nos lleva apenas a cuantificar el área quemada, pero hace falta más, “hay que avanzar, entender las causas en cada una de las regiones, modelar susceptibilidad y riesgo de incendio para prevenirlos”.
“Los fuegos son claves dentro de los programas REDD+ (Programa de Reducción de Emisiones de Carbono causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques), y en el país ni siquiera lo están considerando”, dijo.
“Es cierto que el IDEAM (Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales) tiene un sistema de riesgo, pero hay mucho más que hacer. No sabemos mucho del impacto sobre la calidad de los suelos, no se sabe acerca de los impactos en la fauna y flora, o muy poco, sobre la capacidad de regeneración de los bosques afectados, sobre los efectos de borde, sobre las emisiones de gases efecto invernadero. En el país lo que hace falta es un gran programa de investigación sobre el tema”, puntualizó la experta.
Créditos: http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html
En lo corrido del año se han registrado 123 incendios forestales en Colombia, que han afectado 1.275 hectáreas.

En lo corrido del año se han registrado 123 incendios forestales en Colombia, que han afectado 1.275 hectáreas.

15 de Enero del 2013

Así lo estableció la profesora del Departamento de Biología de la Universidad Nacional de Colombia Dolors Armenteras Pascual.

Según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), a la fecha, 1.275 hectáreas han sido afectadas por incendios forestales. Estos eventos han arrasado con bosques y vegetación nativa del país, y han traído, además, pérdidas económicas para las regiones.

La susceptibilidad de los suelos y de la vegetación colombiana en esta época del año está relacionada con el clima: “durante la época de verano la humedad disminuye y esto hace que la vegetación esté más seca y sea potencialmente más inflamable. Es un fenómeno relativamente normal en la naturaleza cuando hay cierta estacionalidad como la tenemos en Colombia”, explicó la profesora Armenteras.

Y agregó “ahora bien, que sea potencialmente inflamable a que se queme es otra cosa; esto es causado por los aspectos biofísicos –clima, pendiente, tipo de suelo– combinados con una serie de factores sociales y económicos”.

Históricamente, cada comienzo de año ha traído estos incendios; si de antemano se conoce que en este periodo existe esta susceptibilidad, entonces, ¿qué sucede?

“Por la misma complejidad del fenómeno, para los tomadores de decisiones es un reto muy grande desarrollar una política adecuada de manejo de los incendios”.

Además, “los recursos que le dedican al tema tanto en investigación como en gestión son mínimos. Ya hemos visto el bajo porcentaje de municipios con equipamiento de bomberos de algún tipo, eso que estamos hablando de la zona andina, en zonas más remotas del país la situación es peor”.

Refiriéndose al pronunciamiento de la Procuraduría General de la Nación, que determinó que alrededor de 533 municipios en Colombia no tienen los medios suficientes para atender emergencias y reaccionar adecuadamente ante los incendios, y que existen municipios que no cuentan con un cuerpo de bomberos, para Armenteras “faltan sin duda, políticas, y más que nada acciones sencillas que deben emprenderse a nivel nacional, regional y municipal”.

Y citó el ejemplo de España, “en donde contratan guardabosques que patrullan en épocas de riesgo. Son contrataciones temporales que ayudan con la vigilancia, la reacción y atención ante eventos de este tipo”.

“Hay muchas cosas que se pueden hacer. Es cierto, más sequía, más probabilidad de fuego; pero no debemos olvidar que con contadas excepciones, el fuego se inicia por la mano del hombre”, indicó.

Por supuesto, la falta de recursos para procesos de investigación sobre los incendios forestales nos lleva apenas a cuantificar el área quemada, pero hace falta más, “hay que avanzar, entender las causas en cada una de las regiones, modelar susceptibilidad y riesgo de incendio para prevenirlos”.

“Los fuegos son claves dentro de los programas REDD+ (Programa de Reducción de Emisiones de Carbono causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques), y en el país ni siquiera lo están considerando”, dijo.

“Es cierto que el IDEAM (Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales) tiene un sistema de riesgo, pero hay mucho más que hacer. No sabemos mucho del impacto sobre la calidad de los suelos, no se sabe acerca de los impactos en la fauna y flora, o muy poco, sobre la capacidad de regeneración de los bosques afectados, sobre los efectos de borde, sobre las emisiones de gases efecto invernadero. En el país lo que hace falta es un gran programa de investigación sobre el tema”, puntualizó la experta.

Créditos: http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html

Los murciélagos, vitales en la polinización y diseminación de semillas.

 
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Por su tesis de licenciatura sobre los quirópteros, Rocío Lumbreras Ramos, egresada de la FC, obtuvo el tercer lugar del Concurso Nacional de Trabajos Universitarios Sobre Áreas Naturales Protegidas.

Por su tesis de licenciatura sobre los quirópteros, Rocío Lumbreras Ramos, egresada de la FC, obtuvo el tercer lugar del Concurso Nacional de Trabajos Universitarios Sobre Áreas Naturales Protegidas.

7 de Diciembre del 2012
Los murciélagos frugívoros y nectarívoros desempeñan un papel fundamental en los ecosistemas tropicales como diseminadores y polinizadores, al influir directamente sobre la composición, diversidad y dinámica de las comunidades vegetales, así como por su participación en el mantenimiento y regeneración de los bosques.
Esa consideración forma parte del proyecto de investigación de tesis con el que Rocío Lumbreras Ramos, egresada de la Facultad de Ciencias de la UNAM, obtuvo el tercer lugar del Concurso Nacional de Trabajos Universitarios Sobre Áreas Naturales Protegidas 2012, convocado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
En su investigación denominada Composición de la dieta de los murciélagos frugívoros y nectarívoros (Chiroptera: phyllostomidae) en el parque nacional Grutas de Cacahuamilpa, Guerrero, la bióloga que obtuvo el galardón en la categoría de Conocimiento, señala que los quirópteros desempeñan un papel ecológico vital como polinizadores y en la dispersión de semillas.
“Tienen una interacción mutualista con algunas plantas, de las que obtienen el aporte energético y nutricional necesario para su mantenimiento, crecimiento y reproducción, mientras que éstas se benefician con los servicios que los murciélagos les proporcionan, como la dispersión de sus semillas y la polinización de flores.
“Mi contribución fue describir su dieta y con ello determinar la importancia de la interacción entre ambos, lo que podría permitir hacer proyectos de manejo más integrales que involucren el conocimiento total de la ecología de las especies”, dijo.
La universitaria mencionó que el certamen, cuyo premio consistió en un diploma, libros y un viaje por tres reservas naturales, es importante “porque es una forma de promover y fomentar el conocimiento e investigación en torno a la biodiversidad”.
Su propósito es dar a conocer y apoyar las actividades que realizan jóvenes universitarios en favor de la conservación de la naturaleza, en un esfuerzo por incorporarse a las acciones que se desarrollan en las áreas naturales protegidas.
En la ceremonia de premiación, realizada en la Casa del Lago, Mireya Ímaz Gispert, coordinadora del Programa Universitario del Medio Ambiente (PUMA) de la UNAM, resaltó la necesidad de incentivar el desarrollo del conocimiento para comprender los problemas complejos que enfrenta la humanidad en este terreno.
“Las autoridades deben tener presente la necesidad de tomar decisiones, aunque no exista el conocimiento adecuado para definir problemas que nos aquejan, como el cambio climático; no sabemos qué ocurre ni hasta dónde llegará, pero sí qué sucede, y deben tomarse decisiones, aún con un grado de incertidumbre importante”, apuntó.
Alfredo Arellano, director General de Conservación para el Desarrollo de la Conanp, destacó que las áreas protegidas albergan buena parte de la biodiversidad. “En los últimos años, los temas ambientales han sido insertados en la agenda política y están ligados a un proceso de globalización; por tanto, la ciudadanía demanda políticas más precisas para enfrentar problemas como los generados por el cambio climático”.
Boletín UNAM-DGCS-756
Ciudad Universitaria.

7 de Diciembre del 2012

Los murciélagos frugívoros y nectarívoros desempeñan un papel fundamental en los ecosistemas tropicales como diseminadores y polinizadores, al influir directamente sobre la composición, diversidad y dinámica de las comunidades vegetales, así como por su participación en el mantenimiento y regeneración de los bosques.

Esa consideración forma parte del proyecto de investigación de tesis con el que Rocío Lumbreras Ramos, egresada de la Facultad de Ciencias de la UNAM, obtuvo el tercer lugar del Concurso Nacional de Trabajos Universitarios Sobre Áreas Naturales Protegidas 2012, convocado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).

En su investigación denominada Composición de la dieta de los murciélagos frugívoros y nectarívoros (Chiroptera: phyllostomidae) en el parque nacional Grutas de Cacahuamilpa, Guerrero, la bióloga que obtuvo el galardón en la categoría de Conocimiento, señala que los quirópteros desempeñan un papel ecológico vital como polinizadores y en la dispersión de semillas.

“Tienen una interacción mutualista con algunas plantas, de las que obtienen el aporte energético y nutricional necesario para su mantenimiento, crecimiento y reproducción, mientras que éstas se benefician con los servicios que los murciélagos les proporcionan, como la dispersión de sus semillas y la polinización de flores.

“Mi contribución fue describir su dieta y con ello determinar la importancia de la interacción entre ambos, lo que podría permitir hacer proyectos de manejo más integrales que involucren el conocimiento total de la ecología de las especies”, dijo.

La universitaria mencionó que el certamen, cuyo premio consistió en un diploma, libros y un viaje por tres reservas naturales, es importante “porque es una forma de promover y fomentar el conocimiento e investigación en torno a la biodiversidad”.

Su propósito es dar a conocer y apoyar las actividades que realizan jóvenes universitarios en favor de la conservación de la naturaleza, en un esfuerzo por incorporarse a las acciones que se desarrollan en las áreas naturales protegidas.

En la ceremonia de premiación, realizada en la Casa del Lago, Mireya Ímaz Gispert, coordinadora del Programa Universitario del Medio Ambiente (PUMA) de la UNAM, resaltó la necesidad de incentivar el desarrollo del conocimiento para comprender los problemas complejos que enfrenta la humanidad en este terreno.

“Las autoridades deben tener presente la necesidad de tomar decisiones, aunque no exista el conocimiento adecuado para definir problemas que nos aquejan, como el cambio climático; no sabemos qué ocurre ni hasta dónde llegará, pero sí qué sucede, y deben tomarse decisiones, aún con un grado de incertidumbre importante”, apuntó.

Alfredo Arellano, director General de Conservación para el Desarrollo de la Conanp, destacó que las áreas protegidas albergan buena parte de la biodiversidad. “En los últimos años, los temas ambientales han sido insertados en la agenda política y están ligados a un proceso de globalización; por tanto, la ciudadanía demanda políticas más precisas para enfrentar problemas como los generados por el cambio climático”.

Boletín UNAM-DGCS-756

Ciudad Universitaria.

Parque Tayrona, en la mira del ecoturismo.

 
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18 de Octubre del 2012
El debate por la construcción de hoteles dentro del Parque Tayrona se reabrió después de un año desde que el exministro de Ambiente, Frank Pearl, anunciara que no se llevaría a cabo este proyecto.
El profesor Jesús Orlando Rangel, doctor en Biología, profesor del Instituto de Ciencias Naturales de la UN y experto en Biodiversidad y Conservación, aseguró en UN Análisis* de UN Radio: “el Parque Nacional Natural Tayrona, ubicado en la Sierra Nevada de Santa Marta, es una región muy importante biológicamente por la variedad de sistemas y complejos ecológicos que allí se asientan”.
El profesor Rangel destacó la necesidad de preservar la región del parque, por cuanto es una de las pocas zonas del Caribe colombiano en donde hay ecosistemas de manglar, es el área más conservada de los bosques tropicales secos y es el macizo biológicamente más grande del mundo.
“El parque es como un oasis en medio del gran paisaje antropisado y cambiado. Es uno de los pocos sitios en donde tenemos una representatividad de lo que fue la biodiversidad de esta parte del país” insistió.
El presidente de Aviatur, Jean Claude Bessudo, sobre las apreciaciones del profesor y la posibilidad de que se construya un complejo hotelero en el área, señaló: “Hay una ley que prohíbe las construcciones de este tipo en parques naturales, pero hay reglamentaciones que permiten el ecoturismo. Debe haber claridad al respecto. Las normas deben ser aplicadas para todos, es decir: o hay hotelería o no la hay”.
Bessudo indicó que, para llevar a cabo este tipo de proyectos, es indispensable tener claras las normas y la aprobación por parte de las comunidades indígenas. Al respecto, el profesor Rangel anotó la necesidad de crear un punto intermedio y de acuerdo entre las comunidades y las compañías, en este caso la multinacional Six Sences.
El profesor Rangel también dijo que hace falta inversión en la investigación y en la difusión de la biodiversidad del país; pues precisó que, si las entidades gubernamentales dieran los recursos para esta área, habría más turistas responsables y conocedores de la biodiversidad y los ecosistemas colombianos.
Luz Elvira Angarita, directora Territorial Caribe de Parques Nacionales Naturales, manifestó que hay un estudio reciente en el que se identifica la extensión del parque y los propietarios, quienes aducen tener derechos.
Asimismo, la funcionaria afirmó que el proyecto de la compañía Six Sences no es conocido por Parques Nacionales, que no ha sido consultado para evaluarlo y que, por lo tanto, no es posible emitir un concepto sobre esta posibilidad.
Sin embargo, agregó: “Se está trabajando en una nueva política de ecoturismo en Parques Naturales. En esta propuesta, se pretende privilegiar la infraestructura por fuera de las áreas de los parques, lo que implica evitar al máximo las construcciones e incentivar los desarrollos turísticos y ecoturísticos en los alrededores de estas zonas”.
Por otra parte, con respecto a los impactos que tiene la industria hotelera en sectores como el Tayrona, el profesor Rangel sostuvo: “la construcción que planea Six Sences es de gran impacto, a pesar del uso de tecnologías de punta; además no hay entidades que efectúen el monitoreo y vigilancia de los impactos con rigor”.
La pregunta que se plantó durante el debate es por qué este proyecto hotelero no se hace en otra región del Caribe. Y la respuesta, según Rangel, es porque el Tayrona tiene muchos valores agregados.
Julio Carrizosa, profesor pensionado de la UN, puntualizó: “Los parques naturales cumplen una función social y ecológica, en un contexto en el que Colombia es uno de los países más desiguales del mundo. Pero, al construir un proyecto como este, al que posiblemente solo podrán ingresar personas con ingresos altos, el parque se convertiría en un instrumento de inequidad social”.
Finalmente, Óscar Montero, indígena del pueblo kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta, estudiante de Ciencia Política de la UN en Medellín y líder de la comunidad estudiantil indígena, concluyó: “es necesario hacer un mejor manejo ambiental en estas zonas estratégicas y naturales, caracterizadas por unos ecosistemas únicos en el mundo cuya pérdida significa que vamos a perder una cantidad de flora y fauna que no volveremos a recuperar”.
Créditos:http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html
El Parque Tayrona es el área más conservada de los bosques tropicales secos y es el macizo biológicamente más grande del mundo.

El Parque Tayrona es el área más conservada de los bosques tropicales secos y es el macizo biológicamente más grande del mundo.

18 de Octubre del 2012

El debate por la construcción de hoteles dentro del Parque Tayrona se reabrió después de un año desde que el exministro de Ambiente, Frank Pearl, anunciara que no se llevaría a cabo este proyecto.

El profesor Jesús Orlando Rangel, doctor en Biología, profesor del Instituto de Ciencias Naturales de la UN y experto en Biodiversidad y Conservación, aseguró en UN Análisis* de UN Radio: “el Parque Nacional Natural Tayrona, ubicado en la Sierra Nevada de Santa Marta, es una región muy importante biológicamente por la variedad de sistemas y complejos ecológicos que allí se asientan”.

El profesor Rangel destacó la necesidad de preservar la región del parque, por cuanto es una de las pocas zonas del Caribe colombiano en donde hay ecosistemas de manglar, es el área más conservada de los bosques tropicales secos y es el macizo biológicamente más grande del mundo.

“El parque es como un oasis en medio del gran paisaje antropisado y cambiado. Es uno de los pocos sitios en donde tenemos una representatividad de lo que fue la biodiversidad de esta parte del país” insistió.

El presidente de Aviatur, Jean Claude Bessudo, sobre las apreciaciones del profesor y la posibilidad de que se construya un complejo hotelero en el área, señaló: “Hay una ley que prohíbe las construcciones de este tipo en parques naturales, pero hay reglamentaciones que permiten el ecoturismo. Debe haber claridad al respecto. Las normas deben ser aplicadas para todos, es decir: o hay hotelería o no la hay”.

Bessudo indicó que, para llevar a cabo este tipo de proyectos, es indispensable tener claras las normas y la aprobación por parte de las comunidades indígenas. Al respecto, el profesor Rangel anotó la necesidad de crear un punto intermedio y de acuerdo entre las comunidades y las compañías, en este caso la multinacional Six Sences.

El profesor Rangel también dijo que hace falta inversión en la investigación y en la difusión de la biodiversidad del país; pues precisó que, si las entidades gubernamentales dieran los recursos para esta área, habría más turistas responsables y conocedores de la biodiversidad y los ecosistemas colombianos.

Luz Elvira Angarita, directora Territorial Caribe de Parques Nacionales Naturales, manifestó que hay un estudio reciente en el que se identifica la extensión del parque y los propietarios, quienes aducen tener derechos.

Asimismo, la funcionaria afirmó que el proyecto de la compañía Six Sences no es conocido por Parques Nacionales, que no ha sido consultado para evaluarlo y que, por lo tanto, no es posible emitir un concepto sobre esta posibilidad.

Sin embargo, agregó: “Se está trabajando en una nueva política de ecoturismo en Parques Naturales. En esta propuesta, se pretende privilegiar la infraestructura por fuera de las áreas de los parques, lo que implica evitar al máximo las construcciones e incentivar los desarrollos turísticos y ecoturísticos en los alrededores de estas zonas”.

Por otra parte, con respecto a los impactos que tiene la industria hotelera en sectores como el Tayrona, el profesor Rangel sostuvo: “la construcción que planea Six Sences es de gran impacto, a pesar del uso de tecnologías de punta; además no hay entidades que efectúen el monitoreo y vigilancia de los impactos con rigor”.

La pregunta que se plantó durante el debate es por qué este proyecto hotelero no se hace en otra región del Caribe. Y la respuesta, según Rangel, es porque el Tayrona tiene muchos valores agregados.

Julio Carrizosa, profesor pensionado de la UN, puntualizó: “Los parques naturales cumplen una función social y ecológica, en un contexto en el que Colombia es uno de los países más desiguales del mundo. Pero, al construir un proyecto como este, al que posiblemente solo podrán ingresar personas con ingresos altos, el parque se convertiría en un instrumento de inequidad social”.

Finalmente, Óscar Montero, indígena del pueblo kankuamo de la Sierra Nevada de Santa Marta, estudiante de Ciencia Política de la UN en Medellín y líder de la comunidad estudiantil indígena, concluyó: “es necesario hacer un mejor manejo ambiental en estas zonas estratégicas y naturales, caracterizadas por unos ecosistemas únicos en el mundo cuya pérdida significa que vamos a perder una cantidad de flora y fauna que no volveremos a recuperar”.

Créditos:http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html