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LA UNAM DESARROLLA ACCIONES PARA UNA GESTIÓN HIDRÁULICA EFICIENTE EN PUEBLA, OAXACA Y TLAXCALA

 
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gestionhidraulica18 de agosto de 2014

El Programa de Apoyo al Desarrollo Hidráulico de Puebla, Oaxaca y Tlaxcala (PADHPOT) busca promover la gestión eficiente y sustentable de los servicios de agua potable, saneamiento y unidades de riego en poblaciones de escasos recursos para mejorar su competitividad y fomentar un crecimiento equilibrado con participación social.

Los resultados de las acciones emprendidas por el Programa de Manejo, Uso y Reuso del Agua (Pumagua) en Ciudad Universitaria, en distintas FES y el campus Juriquilla, en Querétaro, constituyen el antecedente de la iniciativa.

Los municipios contemplados en el proyecto son Ocotlán de Morelos, San Francisco Telixtlahuaca y Zimatlán de Álvarez, en Oaxaca; Cuetzalan del Progreso, Izúcar de Matamoros, San Martín Texmelucan y Tehuitzingo, en Puebla, y El Carmen Tequexquitla, en Tlaxcala, representativos de las localidades pobres con entre 10 mil y 100 mil habitantes de los tres estados.

A partir de la metodología y tecnología desarrolladas en 2008, en CU disminuyó la extracción del líquido en 23 por ciento y las fugas en la red a la mitad. Con este proyecto extendemos los beneficios de la iniciativa a localidades pobres del país, consideró Fernando González Villareal, director del Pumagua.

Con los trabajos incidimos en el aumento de los fondos federales para atender a los municipios, en algunos casos hasta en 100 por ciento. Hoy cuentan con recursos suficientes para invertir en reparación de pozos, redes potables y drenaje, informó.

Se han firmado convenios con las localidades, basados en el manejo transparente de los presupuestos y la participación de los pobladores. La información de los distintos proyectos ejecutivos está disponible en la página www.agua.unam.mx/padhpot.

No basta con otorgar presupuesto a los municipios para instalar tuberías o pozos, debe integrarse a las comunidades en el uso eficiente y transparente de los recursos. La participación de la Universidad es fundamental para proporcionar tecnología, capacitación y confianza en el manejo adecuado de las inversiones.

Desarrollo hidráulico

En una primera fase, se recabaron cerca de 500 estudios y proyectos impulsados entre 2005 y 2011 sobre los recursos en las tres entidades. La investigación fue realizada por la Coordinación Técnica de la Red del Agua de la UNAM, en colaboración y con financiamiento del Instituto de Ingeniería (II) de esta casa de estudios.

Con esta información y el apoyo de las fundaciones Harp Helú y UNAM, se elaboró la propuesta para promover el desarrollo hidráulico de Puebla, Oaxaca y Tlaxcala, con la selección de ocho municipios piloto, representativos del 13 por ciento de las localidades con entre 10 mil y 100 mil habitantes del país.

González Villareal expuso los resultados del diagnóstico hecho en la segunda fase del proyecto: pérdidas por fugas equivalentes al 50 por ciento del volumen total, falta de planos de las redes y de documentación de la situación financiera de los sistemas, ausencia de tarifas adecuadas, recaudación escasa y una dotación promedio entre 20 y 50 litros diarios por habitante, cantidad por debajo de sus necesidades mínimas.

Actualmente, el PADHPOT registra avances en la mejora de potabilización y saneamiento y en la consolidación de un Observatorio Hídrico, fundamental para estimular la participación de la población en el manejo de los recursos referidos.

Con los trabajos, podría establecerse un esquema especial para proporcionar mejores servicios, saneamiento y drenaje a ciudades entre 10 mil y 100 mil habitantes, para constituir núcleos regionales de desarrollo. La idea es extender el programa al resto del país, concluyó.

Créditos: UNAM-DGCS-475-2014

A PESAR DE LOS ESCENARIOS CATASTRÓFICOS, SEGUIRÁ EN FUNCIONAMIENTO EL SISTEMA LERMA

 
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sistemalerma09 de agosto de 2014

Aunque carece de sustentabilidad y de un régimen hidráulico acorde a la realidad actual de escasez de agua, la cuenca alta del río Lerma seguirá con su funcionamiento, sostuvo Lorena Torres Bernardino, profesora del Sistema de Universidad Abierta (SUA) de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM.

“La realidad es que el Sistema Lerma continuará con el suministro a pesar de los escenarios catastróficos planteados en una serie de diagnósticos realizados por expertos, quienes han señalado que está sobreexplotado y ya no hay agua suficiente para abastecer al Estado de México y al Distrito Federal”, añadió la universitaria.

El punto es cómo la política hídrica nacional permite que ese sistema prosiga si se ha demostrado que el territorio mexiquense es afectado de forma impresionante, pues ese río ya no existe, el cauce está lleno de aguas negras y basura, apuntó Torres Bernardino, ganadora del Premio Bienal IAPEM 2014 por la investigación Sistema Lerma: una visión política en la gestión pública del agua. ¿Solución estatal o federal?, resultado de su tesis de maestría, dirigida por Manuel Perló Cohen, director del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

La profesora detalló que dicho sistema aporta aproximadamente cuatro mil litros cúbicos por segundo a la Ciudad de México.

Por otra parte, indicó que problemas como el crecimiento poblacional mexiquense, aunado a la sobreexplotación hídrica y la contaminación del Lerma, contribuyen a entender por qué el sistema ya no debe seguir en funcionamiento o cambiar su modelo de gestión.

“Entre 1950 y 2013, el número de habitantes en esa entidad se incrementó de un millón 392 mil 623, a 16 millones 202 mil 196, lo que representa mayor demanda del recurso. Por otra parte, en la cuenca de México el volumen de agua subterránea concesionada también es tres veces mayor al volumen de recarga”, señala en su investigación.

Ante ese panorama, la construcción del sistema no cumplió con el objetivo de reducir la sobreexplotación de los acuíferos de la cuenca, porque no fueron acompañados por el rescate de concesiones ni la clausura de pozos, remarcó.

Preocupada por este problema, Lorena Torres también plantea que la situación podría cambiar si se modifica el modelo de gestión, para que los gobiernos de ambas entidades –Estado de México y Distrito Federal–, con la participación de la Federación, establezcan los grados de responsabilidad en la gestión del sistema Lerma después de 70 años de funcionamiento.

La galardonada

La académica cursó la licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública en la FCPyS, donde también estudió la maestría en Gobierno y Asuntos Públicos; ahora se postula para el doctorado en el extranjero. En 2013 fue seleccionada para realizar parte de su investigación de maestría en la Universidad Libre de Berlín, con una beca que le otorgó el Colegio Internacional de Graduados (con sedes en México y Alemania).

El Premio Bienal IAPEM es convocado por el Instituto de Administración Pública del Estado de México (IAPEM), y el galardón será entregado en Toluca, el próximo 22 de agosto.

Créditos: UNAM-DGCS-457-2014

MUESTRAN VENTAJAS DE LOS SISTEMAS DE COSECHA DE AGUA DE LLUVIA EN LA UNAM

 
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cosechadeagua16 de julio de 2014

Frente a las carencias de agua potable en el país, el agua de lluvia es un recurso que podría satisfacer la demanda para consumo humano, riego y otros usos.

La UNAM, como parte de su Estrategia de Universidad Sustentable EcoPUMA, instaló un sistema de cosecha de agua pluvial para ese fin, en el edificio de Programas Universitarios, ubicado en CU; una ecotecnia que evita daños ambientales asociados a la explotación de pozos y a los procesos de distribución, que puede utilizarse para resolver problemas críticos de abasto en zonas urbanas y rurales.

El procedimiento permite captar 104 mil litros del recurso al año y demuestra que es posible recolectar las precipitaciones de manera eficiente para diversos usos.

Este sistema tiene un fin demostrativo y el líquido potable se pone a disposición de la comunidad universitaria con el nombre de Jugo de nube. Actualmente, el primer bebedero se encuentra en el edificio de Programas Universitarios.
Es 100 por ciento seguro, después de someterse a varios tratamientos para cumplir con la Norma Oficial Mexicana (NOM) 127 SSA1-1994; además es monitoreado mensualmente por la Dirección General de Servicios Médicos (DGSM) de la UNAM.

El proceso

La cosecha de lluvia consiste en la instalación de sistemas para captar el agua pluvial, que se puede usar para el baño, limpiar el auto, cocinar o como recurso potable, después de purificarla.

En el edificio de Programas Universitarios se colecta para consumo humano. Durante la temporada de lluvias, la que cae sobre el domo de cristal es canalizada hacia los Tlaloques (tecnología mexicana que separa la parte más sucia de la precipitación) para desechar los primeros 400 litros de cada aguacero y así reducir hasta el 75 por ciento de los contaminantes.

Lo obtenido se almacena en una cisterna que cuenta con componentes que evitan que se agite y se levanten sedimentos.

Posteriormente, a través de un tren de filtración se eliminan los microorganismos dañinos, residuos, metales pesados, olores y sabores. Por último, el recurso se distribuye al bebedero que se encuentra al interior del inmueble. Ahí, los universitarios pueden tomar jugo de nube, apto para consumo humano.

EcoPuma es la estrategia instrumentada por la UNAM para reducir su impacto ambiental y formar profesionistas comprometidos con el medio ambiente. El Programa Universitario del Medio Ambiente (PUMA) coordina los esfuerzos e iniciativas que realizan la institución y su comunidad en este campo.

Créditos:UNAM-DGCS-407-2014

ANALIZAN AGUA Y CONDICIONES DE SALUD DE LA CIUDAD DE MÉXICO

 
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analizanagua12 de julio de 2014

En ocasiones, el agua destinada a los hogares de distintas zonas de la Ciudad de México no es potable en su totalidad. Ante ello, lo más recomendable sería hacer estudios físicos, químicos y biológicos, así como buscar la forma de nivelar el cloro que debe aplicársele para alcanzar una potabilización adecuada.

Sin embargo, esta supervisión no siempre se lleva a cabo, por lo que amplios sectores de la población padecen enfermedades relacionadas con esta problemática, como las gastrointestinales, que afectan sobre todo a niños de entre dos y cuatro años de edad.

“¿En dónde ocurren estas afecciones? En la periferia urbana, donde la calidad en el suministro es deficiente y las condiciones de pobreza y marginalidad hacen que la población no vaya al médico y se acostumbre, de alguna manera, a malvivir con ellas”, dijo Flor López Guerrero, investigadora del Instituto de Geografía (IGg) de la UNAM y especialista en el tema y en las condiciones de salud en la capital del país.

Otro problema asociado es que mucha gente no dispone del recurso en cantidad suficiente para hacer limpieza personal (lavado de dientes y baños de cuerpo entero a diario); además, carece de drenaje, que suple con hoyos negros o letrinas y, en el mejor de los casos, con fosas sépticas, muchas veces en el entorno inmediato de sus viviendas, donde juegan los niños. Entonces comienzan a padecer enfermedades de la piel o de los ojos que dañan, en particular, a infantes de entre cero y cuatro años.

“Hay que recordar que sus viviendas, por lo regular, están rodeadas de tierra. De ahí que los pequeños también sufran conjuntivitis”.

En general, las delegaciones centrales como Benito Juárez, Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza, tienen un buen suministro de agua, es decir, las viviendas la reciben mediante tuberías los 365 días del año, las 24 horas (no obstante, sí llegan a sufrir cortes).

Caso contrario ocurre en las del sur, como Tláhuac, Tlalpan, Iztapalapa, Milpa Alta, Xochimilco y Magdalena Contreras, donde se experimentan graves problemas (paradójicamente, las dos últimas son las que abastecen de más líquido al resto de la urbe).

“El 77 por ciento de los pobladores de estas delegaciones no reciben nada, por lo que deben recurrir a otras fuentes de abastecimiento, como carros cisterna, pipas o animales de carga para acarrearla de otros puntos y almacenarla”, señaló López Guerrero.

Ahora bien, la que tiene los problemas más graves es Iztapalapa, la más poblada de toda la metrópoli. En ella hay un millón 815 mil personas que obtienen líquido de baja calidad o, de plano, no lo reciben.

Muchos de sus habitantes se quejan porque el agua sale de sus llaves en condiciones inadecuadas. Con frecuencia se cuenta con infraestructura hidráulica –tuberías–, pero el líquido que corre es de mala calidad o, sencillamente, aire, acotó.

En opinión de la universitaria, cada vez más personas de la ciudad se quedan sin el recurso y la cantidad se reduce. El caso más grave es Cuajimalpa, que en 1997 recibía 686 litros por habitante al día, cantidad que en 2007 se redujo a 525 (aun así es la delegación con la mayor dotación y, coincidentemente, la que ha tenido un crecimiento más vertical y compacto, por consiguiente, tiene mayor demanda del recurso).

Por el contrario, la que obtuvo Tláhuac entre los mismos años se redujo de 247 a 177 litros por habitante al día, seguida de Xochimilco, que pasó de 270 a 214, y Tlalpan, de 286 a 249.
Lo preocupante es que las delegaciones al sur reciben el líquido por debajo del promedio del Distrito Federal. De 362 litros por persona al día en 1997 pasaron a 327 en 2007, y la tendencia es cada vez más evidente por el acelerado ritmo de crecimiento poblacional horizontal. ¿Qué se puede hacer para tratar de solucionar estos problemas?

Se ha discutido el hecho de incrementar las tarifas. Por ejemplo, en Alemania se cobra el agua que llega a las viviendas, pero también la residual que sale de ellas. Es una medida que obliga a un uso adecuado y permite aprovechar la inversión; que se ahorre en las delegaciones que son dotadas y se aplique en la creación de nueva infraestructura que haga posible llevarla a las zonas del sur, planteó López Guerrero.

En la actualidad se invierte dinero y esfuerzo en el mantenimiento de la infraestructura hidráulica que existe en la Ciudad de México –prácticamente desde el Porfiriato–, en vez de aplicarlos en su extensión y ramificación, pues la metrópoli y su población crecen.

Por ello, la investigadora de la UNAM sostiene que se debe regular el crecimiento, ahora vertical, de la urbe; monitorear las tomas y ventas clandestinas, y atender con eficacia las fugas, causantes de la pérdida del 40 por ciento disponible.

Créditos:UNAM-DGCS-397-2014

En el mundo, 884 millones sin agua potable

 
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Se estima que 1.5 millones de niños menores de cinco años mueren cada año en el planeta, a causa de enfermedades transmitidas por el agua contaminada.
Se estima que 1.5 millones de niños menores de cinco años mueren cada año en el planeta, a causa de enfermedades transmitidas por el agua contaminada.

• Más de 2 mil 500 millones de personas en el orbe carecen de sistemas sanitarios adecuados, reveló la UNESCO

• Para tener líquido con calidad se requieren resolver problemas de cantidad, inequidad y desperdicio, dijo Blanca Jiménez Cisneros, del Instituto de Ingeniería de la UNAM

Porque más de 2 mil 500 millones de personas en el mundo carecen de sistemas sanitarios adecuados y 884 millones más no tienen acceso a agua potable, en el Día Mundial del Agua, el énfasis está puesto en la calidad del líquido.

“Este año, con el lema ‘Agua limpia para un mundo sano’, se considera la calidad del agua, pues en muchas partes del mundo no llega a la gente con las características adecuadas para beberla o usarla en labores agrícolas. Pero tener agua de calidad significa resolver problemas de cantidad, desperdicio e inequidad”, afirmó la doctora Blanca Elena Jiménez Cisneros, investigadora del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM.

Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), 1.5 millones de niños menores de cinco años mueren cada año en el planeta a causa de enfermedades transmitidas por el agua contaminada.

Sin agua limpia, explicó la universitaria –una de las cinco personas en el mundo encargada de la concepción y arranque del Programa Hidrológico Internacional Fase VII de la UNESCO— se propicia un ciclo de pobreza.

Contaminación e inequidad social

Los cuerpos de agua dulce, que antes eran una fuente directa para acceder al líquido, ahora incluyen grandes dosis de contaminantes en muchos sitios del mundo.

“El deterioro de la calidad del agua en ríos, arroyos, lagos y mantos freáticos tiene consecuencias directas sobre los ecosistemas y la salud humana. Esta situación constituye una tragedia humana indescriptible y un obstáculo importante para el desarrollo”, afirmó la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, en un mensaje a propósito del Día Mundial del Agua, que se celebra desde 1993 para concientizar sobre la importancia del líquido y sus desafíos.

Por las enfermedades y los costos económicos que causa el agua contaminada, un reto inminente es prevenir esta condición y generar estrategias de control y restauración, recomendó la UNESCO.

“El Día Mundial del Agua es para reflexionar a nivel mundial sobre estos problemas, que tiene buenos servicios en los países desarrollados y enfrenta muchos retos en los países en desarrollo. Este día funciona en términos de que obliga a los gobiernos a reportar datos, identificar faltantes y establecer objetivos concretos para el año siguiente”, afirmó Jiménez.

La especialista en ingeniería ambiental destacó que la inequidad en el acceso a agua de calidad es un problema generalizado.

“El hídrico es un servicio asociado al nivel socio-económico. En muchos países, las clases pobres tienen servicios muy por debajo de las clases altas, mientras los ricos tienen un alto nivel de servicios hídricos, incluso en países en vías de desarrollo. Y México no es la excepción”, destacó.

Agua y cambio climático

A la complejidad del problema –que también incluye retos de distribución, reducción del desperdicio, tratamiento y reuso— se suma el cambio climático global.

“Entre 40 y 60 por ciento de los costos totales del cambio climático tienen que ver con efectos en el agua, especialmente inundaciones y sequías. Ambas causan graves daños sociales, las primeras son mucho más visibles y difundidas en los medios de comunicación, pero las sequías cuestan diez veces más en términos económicos”, señaló la universitaria.

Blanca Jiménez es la autora líder en el tema del agua en el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC), el organismo de Naciones Unidas que recibió el Premio Nobel de la Paz en 2007.

La investigadora reconoce que, al interior del IPCC, se hace hincapié en el manejo del agua, en protegerla y contemplar los efectos del cambio climático, que agrava la situación actual del agua.

“Es necesario hacer más eficiente el uso y reuso del agua. En una buena franja de México, hacia el centro y el norte, habrá menos disponibilidad del líquido, mientras en otra, al sur, habrá más inundaciones y deterioro de la calidad. El cambio climático será un problema adicional y el IPCC invita a resolverlo desde ahora”, destacó.

Respecto a su participación en el Programa Hidrológico Internacional Fase VII de la UNESCO, Jiménez destacó que también contempla la calidad del líquido, pero atiende también a los métodos de tratamiento de aguas residuales.

“Es importante tener agua limpia, pero hemos quitado del agua más cosas de las necesarias. Por ejemplo el fósforo se ha quitado del agua en los procesos de tratamiento, pero se pasa a los lodos y se confina, lo que ha tenido repercusiones en el suelo, además de que el fósforo va a escasear en el futuro. Por ello recuperarlo es importante”, señaló.

La investigadora universitaria sugirió revalorizar la materia orgánica contenida en las aguas residuales, pues contiene elementos que pueden convertirse en energía y otros que pueden ser nutrientes útiles en el agua de riego.

Créditos: Boletín UNAM-DGCS-175 – dgcs.unam.mx