Avicultura doméstica en el Pacífico la hacen las mujeres

 
Facebooktwittergoogle_plusmail

29 de junio de 2015

mujer

Bogotá D. C., jun. 29 de 2015 – Agencia de Noticias UN- Un estudio en la región pacífica (Chocó, Valle, Cauca y Nariño) permitió conocer los beneficios en seguridad alimentaria y economía familiar que brinda la producción tradicional de gallinas criollas.

A partir de 112 encuestas realizadas a productores campesinos, afrodescendientes e indígenas se determinó que las mujeres lideran esta fuente básica de autosostenibilidad.

Las cifras mostraron que en un 58 % la avicultura doméstica está a cargo de las amas de casa en las comunidades afro y campesinas, mientras que en las indígenas la participación es del 64,2 %.

El propósito de la investigación fue caracterizar los sistemas de producción tradicional en el Pacífico y contribuir así al conocimiento del desarrollo agropecuario sostenible.

Esta fue realizada por los profesores Luz Ángela Álvarez, líder del Grupo de Investigación en Recursos Zoogenéticos de la U.N. Sede Palmira, y Jaime Eduardo Muñoz, ingeniero agrónomo. Además contó con la colaboración del estudiante de Zootecnia Martín Valenzuela, y los de la Maestría en Ciencias Agrarias, Herman Alberto Revelo y Yineth Palacios, encargados de recolectar la información.

Del total de cuestionarios, 35 se realizaron en comunidades afrodescendientes del Chocó, en los municipios de Valle, Medio Baudó y Alto Baudó; 26 se adelantaron en comunidades campesinas del Valle del Cauca, en los municipios de Pradera, Palmira y El Cerrito; 16, en comunidades indígenas del Cauca, en los municipios de Toribío, Jambaló, Guapi y Santander de Quilichao; y 35, en Nariño, específicamente en los municipios de Potosí, Cumbal, Córdoba y Puerres.

El estudio concluyó que en Colombia estos sistemas de producción tradicional tienen un vínculo cercano con la población rural, pues permiten mejorar la calidad nutricional de las familias y ahorrar dinero, toda vez que aportan gran parte de la alimentación. Además, contribuyen al arraigo cultural y a la permanencia en el campo, ya que son heredados a través de las generaciones.

Por lo general, las madres regalan el pie de cría a sus hijas, con el propósito de prepararlas para que sean las futuras avicultoras. Algunas de ellas afirmaron que inician la producción por necesidad, para disponer de alimentos para la familia y reducir gastos domésticos, mientras que otras lo hacen por gusto y tradición.

La mujer también tiene a su cargo el cuidado de las especies menores, como cuyes, cerdos y ovejas, lo cual les permite fortalecer su seguridad alimentaria y obtener recursos monetarios.

El estudio determinó, además, cómo es el manejo de la cría de gallinas. Por ejemplo, en la población afro e indígena, el 81 % de las aves se maneja en libertad; mientras que en la población campesina esta cifra es del 67,3 %.

Este último porcentaje es menor, debido a la cercanía entre las casas y a la amenaza de depredadores, razón por la cual el 32,7 % de las aves permanecen encerradas. Esta situación permite realizar un mejor control en cuanto al ciclo productivo y reproductivo y a condiciones de sanidad.

Un elemento común del Pacífico colombiano es la producción, el consumo y la comercialización de gallina criolla. En los patios de las viviendas se observan ejemplares de distintos colores, tipos de plumaje y crestas, entre otras características.

Estas se caracterizan por ser resistentes a enfermedades y parásitos, y por tener un cuidado especial con la incubación de sus huevos. También son fundamentales para la seguridad alimentaria de poblaciones humanas marginadas.

La producción de huevos y pollos se convierte en un mercado en potencia para los pequeños agricultores, pues se trata de un sistema no contaminante que requiere bajo uso de insumos y poco capital de inversión.

Según la Encuesta Nacional Agropecuaria del Dane, en Colombia para el 2013, la población de aves de traspatio se estimó en 11.053.815, cifra que resalta la importancia de estos sistemas de producción tradicional.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*