



Por su trayectoria académica y aportaciones, Karen Patricia Volke Sepúlveda, del Instituto de Física (IF) de la UNAM, obtuvo la Cátedra de Investigación Marcos Moshinsky en Ciencias Físicas.
A través de este apoyo, otorgado por la Fundación Marcos Moshinsky, desarrollará el proyecto Diseño de Nuevas Técnicas Fotónicas Basadas en el Estudio y Aplicación de Luz Estructurada, mediante la adquisición de equipo para el Laboratorio de Micromanipulación Óptica.
Con esta iniciativa, la académica, junto con su equipo de trabajo, diseñarán distribuciones de intensidad y fase de haces de luz para aplicarlas en micromanipulación óptica y en óptica no lineal.
“Analizar las propiedades de estos haces generará conocimiento en física fundamental”, resaltó.
“Nos hemos diversificado, sobre todo en sistemas aplicados. Por ejemplo, en los últimos años hemos propuesto modelos experimentales de sistemas de dinámica compleja y una línea nueva en óptica no lineal en nanosuspensiones o coloides”, acotó.
La universitaria resaltó que siempre se ha sentido atraída por el área de óptica, que ha evolucionado de manera vertiginosa desde el desarrollo del láser.
“Sus aplicaciones no sólo abarcan la física, sino la química y la biología, donde ha permitido crear importantes herramientas para su desarrollo”. No sólo se puede hacer ciencia básica en óptica, sino instrumentar tecnología, por lo que cada vez hay más grupos y espacios de indagación, indicó.
Prueba de ello es que los estudios realizados en México son del más alto nivel y no sólo en la UNAM, sino en lugares como el Centro de Investigaciones en Óptica en León, Guanajuato; el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior (CICESE), en Ensenada, así como en el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), en Puebla, por mencionar algunos.
La cátedra
La Cátedra Moshinsky consiste en el apoyo a siete proyectos de investigación originales de diferentes áreas que contribuyan al desarrollo científico del país. En este caso, Volke decidió emplear los fondos para equipar el recientemente inaugurado Laboratorio de Micromanipulación Óptica, cuyo origen se remonta al de Pinzas Ópticas, fundado en 2004.
“Con ello tendremos más posibilidades para realizar investigación y explotar la capacidad de este nuevo espacio”, subrayó.
La Fundación Marcos Moshinsky hace una destacada labor al respaldar el trabajo de jóvenes investigadores, porque así se impulsa el quehacer científico. Recibir esta distinción es un logro porque quienes compiten por este apoyo son académicos de alto nivel. Me siento honrada de ser una de las beneficiadas, concluyó.
Créditos: UNAM-DGCS-341-2014