Extracción y minería: cambios sociales en América Latina.

 
Facebooktwittergoogle_plusmail
14 de Enero del 2013
La extracción minera y petrolera en Latinoamérica traen graves consecuencias sociales, económicas y ambientales.
Anthony Bebbington, geógrafo, profesor y director de la Escuela de Posgrado de Geografía de la Universidad de Clark (EE.UU.), ha estudiado las relaciones entre las industrias extractivas, los conflictos y el desarrollo rural en Perú, Bolivia, Ecuador y El Salvador.
Recientemente visitó Colombia para participar en el I Seminario Internacional Extractivismo y Minería en América Latina, organizado por la Universidad Nacional de Colombia, en el que compartió la investigación que viene realizando desde hace más de siete años en estas naciones.
Ha encontrado que los conflictos sociales, los daños ambientales y las economías nacionales son similares en algunos aspectos, y se pregunta si la industria extractiva les permitirá alcanzar el desarrollo económico o si se quedarán solo en “los conflictos, la degradación y el crecimiento desigual”.
Los conflictos socioambientales relacionados con la expansión de la industria extractiva se han convertido en la principal fuente del conflicto social. Por ejemplo, “en Bolivia, durante el año 2009, se experimentaron nuevas tensiones entre el Estado y grupos indígenas en las regiones del Chaco y el norte amazónico, acerca de la propuesta de expansión de las operaciones hidrocarburíferas en el primer instante y la iniciación de operaciones exploratorias en el segundo”, afirmó Bebbington.
El análisis realizado por el geógrafo plantea los motores que han impulsado la extracción y la minería en América Latina y Centro América, y que son los precios, la demanda, las reformas y proyectos políticos (Código Minero, ajuste en pago de impuestos, tipificación como delito a la minería ilegal), la integración regional, así como la aparición de nuevos inversionistas.
Otro de los hallazgos fue el cambio de los “imaginarios nacionales” en cuanto a los temas de identidad y de nociones del concepto del subsuelo.
En Perú, las construcciones de visiones del futuro se dan desde el binomio subsuelo/desarrollo. Con la mina más grande de oro en América del Sur, el subsuelo se convierte en una salvación para la crisis económica, como un modelo de crecimiento, estabilidad y redistribución.
“El concepto subsuelo en Bolivia dejó de ser una noción asociada a la naturaleza por una de soberanía o nacionalismo, cambia la figura de derecho de acceso a la tierra, visto como control y no como concesión, que genera una carga fiscal para inversión social. El subsuelo se convierte en la reconstitución de los Estados, el manejo macroeconómico, la relación Estado/sociedad”.
La extracción y la minería se convierten en un sector dinámico del desarrollo de América Latina que genera un alto costo social, ambiental y de derechos humanos.
Los problemas sociales que cuestionan hasta qué punto estos conflictos podrían marcar el comienzo de los cambios políticos, culturales, económicos e institucionales (en lo privado y en lo público), deberían conducir a la prohibición –por lo menos en Colombia– de la minería.
Créditos:http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html
A septiembre de 2011, el Sistema de Información Ambiental Minero Energético (Siame) indicó que 1.717 empresas tenían títulos vigentes de concesiones para explorar o explotar minas, y que 7.200 títulos estaban en manos de particulares.

A septiembre de 2011, el Sistema de Información Ambiental Minero Energético (Siame) indicó que 1.717 empresas tenían títulos vigentes de concesiones para explorar o explotar minas, y que 7.200 títulos estaban en manos de particulares.

14 de Enero del 2013

La extracción minera y petrolera en Latinoamérica traen graves consecuencias sociales, económicas y ambientales.

Anthony Bebbington, geógrafo, profesor y director de la Escuela de Posgrado de Geografía de la Universidad de Clark (EE.UU.), ha estudiado las relaciones entre las industrias extractivas, los conflictos y el desarrollo rural en Perú, Bolivia, Ecuador y El Salvador.

Recientemente visitó Colombia para participar en el I Seminario Internacional Extractivismo y Minería en América Latina, organizado por la Universidad Nacional de Colombia, en el que compartió la investigación que viene realizando desde hace más de siete años en estas naciones.

Ha encontrado que los conflictos sociales, los daños ambientales y las economías nacionales son similares en algunos aspectos, y se pregunta si la industria extractiva les permitirá alcanzar el desarrollo económico o si se quedarán solo en “los conflictos, la degradación y el crecimiento desigual”.

Los conflictos socioambientales relacionados con la expansión de la industria extractiva se han convertido en la principal fuente del conflicto social. Por ejemplo, “en Bolivia, durante el año 2009, se experimentaron nuevas tensiones entre el Estado y grupos indígenas en las regiones del Chaco y el norte amazónico, acerca de la propuesta de expansión de las operaciones hidrocarburíferas en el primer instante y la iniciación de operaciones exploratorias en el segundo”, afirmó Bebbington.

El análisis realizado por el geógrafo plantea los motores que han impulsado la extracción y la minería en América Latina y Centro América, y que son los precios, la demanda, las reformas y proyectos políticos (Código Minero, ajuste en pago de impuestos, tipificación como delito a la minería ilegal), la integración regional, así como la aparición de nuevos inversionistas.

Otro de los hallazgos fue el cambio de los “imaginarios nacionales” en cuanto a los temas de identidad y de nociones del concepto del subsuelo.

En Perú, las construcciones de visiones del futuro se dan desde el binomio subsuelo/desarrollo. Con la mina más grande de oro en América del Sur, el subsuelo se convierte en una salvación para la crisis económica, como un modelo de crecimiento, estabilidad y redistribución.

“El concepto subsuelo en Bolivia dejó de ser una noción asociada a la naturaleza por una de soberanía o nacionalismo, cambia la figura de derecho de acceso a la tierra, visto como control y no como concesión, que genera una carga fiscal para inversión social. El subsuelo se convierte en la reconstitución de los Estados, el manejo macroeconómico, la relación Estado/sociedad”.

La extracción y la minería se convierten en un sector dinámico del desarrollo de América Latina que genera un alto costo social, ambiental y de derechos humanos.

Los problemas sociales que cuestionan hasta qué punto estos conflictos podrían marcar el comienzo de los cambios políticos, culturales, económicos e institucionales (en lo privado y en lo público), deberían conducir a la prohibición –por lo menos en Colombia– de la minería.

Créditos:http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co/inicio.html

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*