



05 de octubre del 2013
Esa fue una de las preguntas que intentaron responder varios de los participantes a la reunión de la Asociación Iberoamericana de Enseñanza Superior de la Minería (AIESMIN), que se realizó en Medellín.
Al respecto, Juan María Menéndez Aguado, de la Universidad de Oviedo en España, explicó que más que hablar de una minería responsable, el tema es cómo la educación ambiental tiene que utilizarse dentro de la minería para “conseguir una conciliación entre lo que a la gente le gustaría ver verde y muy lindo, y la necesidad que hay de materias primas exigida por la propia sociedad”.
En ese sentido, dijo que la minería sí puede llegar a ser sostenible, pero el problema es que el concepto de sostenibilidad ambiental es relativo y no está definido. “La pregunta realmente es: ¿puede ser la humanidad ambientalmente sostenible?”
El analista insistió en que un país que quiera ser desarrollado no puede basarse únicamente en la producción de materias primas, sino generar un tejido industrial que permita producir transformados que se surtan de las materias primas internas y, así, los bienes de consumo que la sociedad demanda sean en lo posible de origen nacional.
“De lo que estamos hablando es que ahorraríamos en emisiones de carbono, transporte, tendríamos precios más justos y sociedades más responsables en el consumo y la producción”, resaltó.
Por eso, dijo que uno de los países en el mundo que probablemente haya conseguido una mejor conciliación socioambiental de la actividad minera es Australia, pues desde hace más de una década los agentes sociales, aborígenes, representantes de todo tipo de comunidades y empresas, etc., llegaron a un acuerdo. “Dijeron: el país tiene unos recursos y unas necesidades, hay unas líneas rojas que no hay que pasar y todo el mundo se puso de acuerdo para desarrollar la minería como una actividad industrial más, con fiscalización evidentemente del Estado, para garantizar que todo lo que se haga esté bien”.
En cuanto a esta discusión, Michael Karmis, de la Virginia Tech University en Estados Unidos, manifestó que cree que sí es posible una minería ambientalmente responsable y que de hecho en Suramérica ya hay muchos ejemplos destacados por su adecuado manejo ambiental, inversión en la comunidad y buenas prácticas de sostenibilidad.
Justamente, señaló que para hacer minería se necesita financiación y “en la actualidad ningún banco va a prestar recursos a un proyecto si no demuestra cómo va a hacer ese desarrollo sostenible”.
Finalmente, Oswaldo Bustamante, profesor de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional de Colombia, expresó que desde la academia hay que emprender la construcción de nuevos programas curriculares que estén más acoplados a la realidad que vive el planeta, pues “no podemos separarnos del medioambiente”.
Créditos :
http://www.agenciadenoticias.unal.edu.co