



- Dentro de las plantas medicinales, la caléndula se encuentra entre los 15 primeros cultivos que se producen y comercializan en Colombia.
1° de Agosto de 2012
Investigadores de la UN Palmira identificaron, por primera vez, un proceso que permite realizar una adecuada fertilización para obtener mayor productividad en los cultivos de caléndula.
Según la encuesta nacional de plantas medicinales y aromáticas de Colombia, realizada por el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt, la caléndula (Calendula officinalis L.), más conocida como “flor de todos los meses”, es empleada por el 72% de los laboratorios del país y es la especie con mayor volumen de comercialización con un porcentaje total de 26,9%.
Pese a su importancia en el mercado de las plantas medicinales, hasta ahora, el manejo agronómico que se le hace a sus cultivos es inadecuado, pues los agricultores fertilizan sin evaluaciones ni recomendaciones técnicas para la especie.
Encaminada a la reducción de los costos de producción a través de un uso racional de fertilizantes de síntesis industrial y abonos orgánicos, una investigación de Yuly Samanta García, estudiante de la Maestría en Ciencias Agropecuarias de la UN en Palmira, ha logrado aportar conocimientos valiosos en esta vía al identificar, por primera vez, los requerimientos nutricionales de esta especie.
“En los resultados preliminares, encontramos que la extracción de los nutrientes evaluados a los tres meses de edad coincidieron con la época de mayor floración y que el potasio fue el nutriente de mayor concentración en todas las estructuras de la planta y etapas fenológicas”, dijo la estudiante.
En ese sentido, se identificó que para producir un kilogramo de materia seca de caléndula, a los dos meses de edad y en condiciones climáticas adecuadas, la planta extrae 32,9 g/kg (gramo por kilogramo de materia seca) de nitrógeno (N), 11,8 g/kg de fósforo (P) y 115,3 g/kg de potasio (K), que equivalen a una extracción de 21% de N, 7% de P y 72% de K.
La investigadora indicó que “se presentaron diferencias estadísticas en las etapas fenológicas con respecto a la extracción de nutrientes; para fósforo y potasio en plantas de tres meses de edad existen diferencias estadísticamente significativas, mientras que para el nitrógeno no se encontraron diferencias en ninguna de las etapas fenológicas”.
Con esta referencia, que se constituye en la primera información básica para el establecimiento de planes de fertilización en el Valle del Cauca, los investigadores realizan otros experimentos que permitan probar tratamientos adecuados y sus efectos en las plantas.
Así, los investigadores montaron un experimento en predios de la UN en Palmira, aplicando a diario 20 tratamientos en forma de fertirriego, utilizando soluciones nutritivas en cada etapa fenológica y evaluando el comportamiento.
Los resultados, hasta ahora preliminares, han permitido encontrar dos tratamientos efectivos con un mayor rendimiento expresado de materia seca y tamaño de los capítulos florales (flores).
“En cuanto a la producción de capítulos florales, encontramos dos tratamientos que presentan un equilibrio nutricional, brindándole así a la planta un proceso de nutrición adecuado a sus necesidades, y expresándolo en la precocidad de su producción”, sostuvo la estudiante.
El profesor Manuel Sánchez, director del Grupo de Investigación en Plantas Medicinales (GIPM) de la UN en Palmira, dijo que con esta investigación, no solo se contribuirá al adecuado manejo nutricional de la planta, sino también al progreso de este sector agropecuario.
“La nutrición, sea de forma orgánica o convencional, juega un papel básico en la alta productividad del agroecosistema, con la cual se obtienen mayores relaciones de costo-beneficio para el productor”, concluyó Sánchez.
Créditos: agenciadenoticias.unal.edu.co