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Afecta industria petrolera y agropecuaria grupos de anfibios y reptiles

 
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En áreas de alto impacto petrolero, investigadores de la UNAM han encontrado que, en cuanto a anfibios y reptiles, todos los grupos han sido afectados: salamandras, ranas y cecilias, por un lado, y tortugas, cocodrilos, lagartijas y serpientes, por el otro.
En áreas de alto impacto petrolero, investigadores de la UNAM han encontrado que, en cuanto a anfibios y reptiles, todos los grupos han sido afectados: salamandras, ranas y cecilias, por un lado, y tortugas, cocodrilos, lagartijas y serpientes, por el otro.

27 de diciembre de 2012
• Han sido alterados salamandras, ranas y cecilias, por un lado, y tortugas, cocodrilos, lagartijas y serpientes, por el otro
• La industria agropecuaria también contribuye a deteriorar el medio ambiente en distintas zonas del sureste del país

Investigadores del Instituto de Biología (IB) de la UNAM analizan, desde 1998, los efectos de la explotación petrolera en varios puntos del país.

Ese año, un equipo de trabajo comenzó un estudio en las zonas con más conflictos sociales relacionados con esa actividad –desde el sur de Veracruz, hasta el norte de Campeche, antes de la Laguna de Términos–, para establecer los daños en su flora y fauna. En 2002 lo concluyó, y en 2005, hizo público un documento con los resultados sobre biodiversidad.

Meses después de que el análisis fuera concluido, Pemex abrió el parque ecológico Jaguaroundi, en la periferia de las instalaciones de sus complejos petroquímicos Cangrejera, Pajaritos y Morelos, al sur de Veracruz, y en 2011, el Tuzandépetl, en Ixhuatlán del Sureste, en el mismo estado.

A la fecha, los universitarios no han dejado de monitorear esas áreas de alto impacto petrolero y comparar los efectos que han encontrado en ellas con los estudios que llevaron a cabo en Los Tuxtlas, otra región de Veracruz bien conservada, y con gran diversidad de especies.

“En cuanto a los anfibios y reptiles, podemos afirmar que todos los grupos han sido afectados: salamandras, ranas y cecilias, por un lado, y tortugas, cocodrilos, lagartijas y serpientes, por el otro. Ahora bien, en el momento que hicimos la investigación, vimos que las explotaciones petroleras eran responsables de muchos daños, sí, pero que en realidad las afecciones más significativas se debían a la acción combinada de las industrias petrolera y agropecuaria presente en esas zonas”, señaló Víctor Hugo Reynoso Rosales.

Los investigadores detectaron en los cuerpos de agua focos de contaminación originados por los germicidas y acaricidas que aplican a las vacas lecheras, y por los herbicidas que se emplean para eliminar algunas especies de plantas no deseadas.

“En el caso de los anfibios, se ven más impactados por los químicos que lanza la industria agropecuaria, que por los de la petrolera. Por ejemplo, vimos especies de ranas que saltaban tranquilamente en lugares llenos de chapopote”, indicó el herpetólogo.

La industria petrolera ocasiona un grave deterioro ambiental cada vez que excava un pozo, deseca un pantano y/o redistribuye un cuerpo de agua, pero la agropecuaria también, al verter directamente en los cuerpos detritus peligrosos, que tardan mucho tiempo en degradarse.

“Pensamos que lo que causa la pérdida de biodiversidad en la planicie del Golfo de México es la acción combinada de estas dos fuentes contaminantes, y no sólo una, de ahí que propongamos estudiar los efectos de ambas. Debemos abordar el problema en su totalidad, no de manera parcial”, aseveró.

Respecto al parque ecológico Jaguaroundi, aunque está rodeado por complejos petroquímicos contaminantes que emiten ingentes cantidades de humo y olores fuertes, guarda una diversidad de especies muy rica.

“Esperábamos hallar en su interior un intenso deterioro ambiental, sin embargo, todo parece indicar que bastaría que existan fragmentos o remanentes de vegetación suficientemente grandes, para que las poblaciones de anfibios y reptiles se mantengan bien. Es posible que esos espacios absorban de manera eficiente los contaminantes y, por consiguiente, eviten que se alteren los hábitats específicos de anfibios y reptiles. Esto es algo completamente inesperado para nosotros”, admitió.

Reynoso Rosales y sus colaboradores exploran ahora el nuevo parque ecológico Tuzandépetl, donde también han encontrado gran diversidad de especies.

Créditos: UNAM-DGCS-793/2012

Si no actuamos de inmediato, pueden acenturarse problemas como el de la seguridad: José Narro

 
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Si no actuamos de inmediato, pueden acenturarse problemas como el de la seguridad: José Narro
Si no actuamos de inmediato, pueden acenturarse problemas como el de la seguridad: José Narro

17 de mayo de 2010

• La UNAM, el gobierno de Campeche y Fundación UNAM, firmaron un convenio para crear la Unidad de Vinculación y Educación del Sureste “Mtro. Justo Sierra”
• Si no eliminamos analfabetismo y aumentamos escolaridad, cometeríamos un grave error histórico, dijo el rector de la UNAM

Problemas graves como el de seguridad que nos agobia, la desigualdad ancestral, los migrantes, el cambio climático, la energía, la contaminación, el agua y el estado de derecho pueden acentuarse si no actuamos de inmediato y en la dirección correcta, advirtió el rector de la UNAM, José Narro Robles.

La educación, la ciencia y la tecnología constituyen el cimiento del desarrollo nacional y estamos en el momento de las decisiones para eliminar el analfabetismo, aumentar la escolaridad y elevar la cobertura en educación superior. No hacerlo sería un grave error histórico que nos reprocharán las próximas generaciones, aseveró.

Ante ello, dijo, es tiempo de aceptar que se requieren mayores inversiones en ciencia y tecnología. Se trata de un esfuerzo que involucra a todos los poderes públicos y tiene que ser un compromiso nacional. Por esas circunstancias, hemos planteado la imperiosa necesidad de contar con presupuestos multianuales para ampliar la cobertura en educación superior.

En la conferencia magistral que ofreció en el Centro de Convenciones, “Educación y ciencia como puntales para el desarrollo de México”, advirtió que sin contar con certidumbre en torno a los recursos económicos necesarios, la autonomía de las instituciones de educación superior, garantizada en la Constitución, está incompleta e incluso amenazada.

Narro Robles estableció que en el país parece que se ha perdido la noción de futuro. Con frecuencia, lo inmediato se antepone a lo trascendente y no parece existir una visión de Estado para el porvenir, ni tampoco un proyecto claro que compartamos la mayoría de los mexicanos.

Ante el gobernador de Campeche, Fernando Ortega Bernés, sostuvo que en un país en el que casi la mitad de su población vive en condiciones de pobreza, la educación pública es la vía para que muchos jóvenes tengan acceso al conocimiento y a la superación como ciudadanos.

Estrechan lazos UNAM-Campeche

Posteriormente, la UNAM y el gobierno del estado suscribieron dos convenios de colaboración. Uno, general, para impulsar actividades académicas, científicas y culturales, en áreas de interés común; y otro, específico, para la construcción de la Unidad de Vinculación y Educación del Sureste “Mtro. Justo Sierra Méndez”, en el que también participará Fundación UNAM.

Con esta Unidad, en la que colaboran 11 facultades centros e institutos de esta casa de estudios, la Universidad Nacional busca emprender acciones relacionadas con la enseñanza, la investigación, la vinculación y la difusión de la cultura. Además de ser un proyecto que interactúa con propuestas sustentables para el ambiente.

Al asegurar que estos convenios son trascendentales para el desarrollo de la entidad, el gobernador Fernando Ortega Bernés sostuvo que permitirán el fortalecimiento académico, científico y cultural del estado, en beneficio de los campechanos.

El México del siglo XX y del nuevo siglo es, en mucho, el de la Universidad. Los cien años de la UNAM, fundada con ese carácter en 1910 por un gran campechano, Justo Sierra Méndez, reflejan gran parte del quehacer de nuestro país durante este periodo, añadió.
Créditos: UNAM. DGCS -300/unam.mx